De primero a sexto de primaria también estuve en el colegio Mayor Zaragoza, con muchos de mis compañeros de infantil , por lo que llevo media vida con ellos o eso me parece a mí.
De primero solo recuerdo que nos tocó una maestra nueva Ester, muy joven y agradable.
Me costaba muchísimo leer , mi madre no encontraba el momento ni la forma de que me apeteciera leer y fue como una enfermedad para mí y mi madre que lo sufrió.
Al final aprendí pero lo que más recuerdo es la insistencia de mi madre de que leyera , leyera,leyera...
En segundo nos dió clase mi vecino Juan Corzo , era muy bromista y como me conocía siempre decía que si me portaba mal se lo iba a decir a mis padres, pero en realidad siempre decía que era muy buena y obediente .
En tercero cambiamos de profesora y nos toco la maravillosa Teresa Adriana, para mí la mejor del mundo, porque era además de cariñosa, muy buena maestra, nos enseñaba con mucha paciencia y a penas nos castigaba. Siempre nos traía chucherías para recompensarnos si nos portabamos bien y bombones en Navidad; cuando dejó el centro, para jubilarse todos lloramos mucho porque la queríamos de verdad y al año siguiente vino a visitarnos y nos trajo regalos para todos.
Es una santa cuando me ve a mi y a mi madre siempre se para y se preocupa de como voy en los estudios y me aconseja siempre que sea responsable y aplicada, como era con ella.
En esos años hicimos las comunión un día de los más importantes de mi vida, nos pasemos todo cuarto de como iba a ser mi nuestra comunión y después de como había sido. Un año muy movido.
Quinto y Sexto estuvimos con Jose Luis Arnedo, más serio y estricto, ya nos trataba como si fuéramos mayores, porque nos decía que íbamos a ir al instituto y nos decía que teníamos que empezar a estudiar. Lo que más recuerdo de él es que teníamos que hacer todos los fines de semana una redacción para leerla los lunes y a mí se me agotaban los temas y no sabía de que hablar.
Porque muy pocos fines de semana pasaba algo, es decir, había fiestas, o algún suceso extraordinario, por lo que siempre le contaba lo que había hecho el fin de semana,lo mismo, o ir al cortijo o quedarme en casa. También le hablábamos de lo que comíamos y quién había ido al cortijo ese fin de semana, por lo que estaba enterado de mi vida y de medio pueblo.
Lo mejor de todo primaria fue el viaje de estudios que hicimos a la Sierra de Cazorda (Jaén), porque era la prima vez que nos quedabamos solos por la noche , sin nuestro padres en un lugar donde no nos conocían y podiamso hacer lo que queriamos mientras no se enteraran los maestros.
Estuvimos emocionados tres meses antes un viaje que solo duró tres días, pero para nosotros era como la escapada de nuestra vida, porque iban los niños que nos gustaban y algunso con los que saliamos.
Aquí os pongo las fotos que os puse por equivocación en la otra redacción y son del viaje que estoy contando, en una estoy con Estela , Tamara y Elena, y en otra con Tamara y Natalia.
